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viernes, 20 de mayo de 2011

15-M , Puerta del Sol. Con un texto de Shandy -Sin permiso de tu cara ni licencia deustedes- (blog)

LLegué muy pronto -hoy salgo antes-. Unos centenares de jóvenes sentados en el suelo en corrillos hablaban sobre distintos temas.
 Consignas múltiples y dispares nos aseguran de que a pesar de lo que diga el señor Ansón no hay ninguna conspiración sino gente ilusionada con un proyecto de democracia real.
















 Alguna parodia sobre un futuro posible.





 Los niños también se expresan.

La Plaza de Sol empieza a llenarse y también las calles adyacentes.


Los lujosos edificios de la calle Alcalá siguen ahí cuando regreso a casa para contároslo sabiendo que eso va a más.




SHANDY EN SIN PERMISO DE TU CARA NI LICENCIA DE USTEDES (tenéis el enlace a su blog a la derecha de éste)

Aquí también tenemos SOL (Praza Maior, Lugo)

¿No ves la estaca a la que estamos todos atados?,

Si jo l'estiro fort per aquí 

i tu l'estires fort per allà, 
segur que tomba, tomba, tomba 
i ens podrem alliberar.
(L’ Estaca, Lluis LLach)
Para bien y para mal, en una pequeña ciudad sabemos que nos desconocemos mucho porque nos conocemos un poquito casi todos. En las concentraciones y sentadas de Indignados en la Plaza Maior de mi ciudad, se me ofrecen estampas no menos peculiares que en otras plazas del resto del país: una joven dando un yogur a su hijo, padres y madres con niños sobre sus hombros o bebés en carritos, perros pacientes y educados con sus amos… A bastantes de los que allí están no les desconozco del todo, sé que son universitarios, licenciados en paro, trabajadores con o sin trabajo, pensionistas, profesores, administrativos, escritores, artistas… También sé que algunos son “cristianos de base”, pertenecen a asociaciones ecologistas, están implicados en Comercio justo, colaboran con ONG, participan en diferentes asociaciones culturales y movimientos ciudadanos… Pienso, mientras los observo, que son un muestrario de las diferentes personas que se concentran en otras plazas y que fueron tildados por algún periodista con el descalificativo de “Chavalada”. Muchos de esta “Chavalada” (bastantes con más de cuarenta) llevan tiempo trabajando silenciosamente en colectivos y organizaciones al margen de las instituciones, planteando alternativas y contribuyendo con pequeños gestos a una sociedad más justa, y algunos viviendo al margen de un sistema económico para el que no cuentan, un sistema que está corrompido y, queramos o no, tiene fecha de caducidad. Estos colectivos y movimientos alternativos quieren tener voz y acabar con el estereotipo de los nini o de los jóvenes enquistados en las alforjas de papás canguros. Mientras la mayoría de la clase política va por un lado, apoyados por minorías a las que les funciona su gestión y por desconcertados o poco críticos ciudadanos, muchas minorías, que no les va tan bien o no se sienten conformes con lo que se les ofrece, hilan y tejen por su cuenta y ahora quieren que se les escuche. ¿Hace falta recordar a otros jóvenes, más o menos “ilustrados”, que en los 60 y 70 se rebelaban en la sombra y vivían de espaldas al paso que marcaba el régimen de un general dictador? Tal vez eran la “Chavalada” de entonces que cuando tuvieron oportunidad tomaron voz y mando y mal que bien ayudaron a construir una democracia que hoy cuestionamos porque los tiempos cambian. Sería de ingenuos pensar que el Movimiento 15-M tiene una barita mágica para trasformar a corto plazo - a golpe de asambleas y redactando justas peticiones más o menos viables- un sistema económico que lleva mucho tiempo cometiendo errores de bulto y devorando a quienes lo sostienen sobre sus hombros. También es de ingenuos pensar que pretendía incidir sobre los resultados de las pasadas elecciones, o esperar que se esfume en el aire y pelillos a la mar. Sí, es de ingenuos. Esto es la punta del iceberg de un solapado descontento, una digna protesta y llamada de atención dirigida a los políticos que colaboran con un sistema que necesita cambios profundos, porque muchos ciudadanos no quieren seguir entregándose para pagar el tributo al Minotauro del poder financiero, no están dispuestos a ser devorados por un sistema corrupto y que se rige sólo por el beneficio económico y genera desigualdad e injusticia. El problema es de gran calado y no se arregla con la alternancia de siglas en elecciones locales o generales, pasa también por reformar la Constitución y cambiar leyes. Se levantarán las acampadas, puede que el movimiento se disperse y se diluya aparentemente, pero no nos engañemos, la mecha está prendida y el bosque lleno de maleza. El 15-M es sobre todo un movimiento crítico y de concienciación ciudadana, el despertar de un letargo social y una bocanada de aire fresco que muchos deseábamos. Sólo por esto ya merece ser respetado y tenido en cuenta, y miope es la mirada de partidos políticos y periodistas que lo ningunean. Lo que si debemos tener claro los Indignados es que somos corredores de fondo, tendremos que resistir sabiendo que hay que cambiar leyes para domar al Minotauro más tarde que pronto, que el camino es difícil, largo y no exento de riesgos y zancadillas. El Minotauro es una bestia fuerte, soberbia, bien alimentada y sabe guarecerse en los intrincados laberintos de la ley y del poder internacional. Se necesitan muchos hilos de Ariadna para traspasar fronteras, concienciar poco a poco, instar a la responsabilidad ciudadana, a la solidaridad, a la realización de pequeños gestos que a largo plazo modifican actitudes. Y mantenernos unidos exigiendo a los gobernantes que modifiquen leyes, que planten cara a la dictadura internacional del poder económico y establezcan políticas de justicia y equilibrio para los ciudadanos y el planeta en que vivimos. Sí, los Indignados tendremos que ser corredores de fondo, tener paciencia y constancia. Tomemos aire, resistamos, sobran los motivos:



"Nunca el poder del dinero fue tan inmenso, tan insolente y tan egoísta, y nunca los fieles servidores de Don Dinero se situaron tan alto en las máximas esferas del Estado [...] La brecha entre los más pobres y los más ricos jamás ha sido tan profunda; ni tan espoleados el afán de aplastar al prójimo y la avidez por el dinero [...] Los líderes políticos, económicos e intelectuales y la sociedad no tienen que ceder ni permitir la opresión de una dictadura internacional real o de los mercados financieros que amenazan la paz y la democracia [...] 


El pensamiento productivista, impulsado por Occidente condujo al mundo a una crisis de la que debe salir a través de una radical ruptura con el concepto de "crecer" no solo en el campo financiero sino también en el dominio de las ciencias y la tecnología. Ya es el momento de que las preocupaciones acerca de la ética, la justicia y el equilibrio duradero (económico y medio ambiental) prevalezcan. Porque son los riesgos más serios que nos amenazan".
¡Indignaos!, Stephane Hessel



[Image]


Ysupais dijo...
Buena recogida de carteles... Lo enlazo con mi blog.
Gracias un Saludo desde Madrid.
Ysupais
20 de mayo de 2011 22:43




Carmela dijo...
Buenísimas imágenes!
Emociona ver esta movida espontánea.
Otro mundo es posible!!
Abrazos!
21 de mayo de 2011 05:11




Eva Magallanes dijo...
Mi reconocimiento a este movimiento ciudadano... la primera gran revolución, siento, es en contra del conformismo, de la apatía, del aislamiento, estamos ahí también todos los ciudadanos/as que en el resto del mundo estamos igualmente agobiados por un sistema de mierda, por políticos que son un estorbo en vez de un aporte, por un capitalismo que nos esclaviza al consumo y a las deudas. Quizás esté sepultada cuando suceda, pero quiero creer que los espontáneos movimientos civiles no partidistas irán transformando al planeta. Muchos/as ya sabemos que esa tarea está en nuestras manos no en las manos de los esbirros del sistema.
Mi fraternidad y mis aplausos para españoles y españolas que están mostrando un camino para el resto del planeta. Hoy,en Chile también hubo una gran movilización ciudadana en contra de HidroAysén... lo que ya sabemos, los enormes capitales depredando y depredando a nuestras reservas naturales.
Un abrazo muy grande para ti!
21 de mayo de 2011 06:06




Ricardo Miñana dijo...
Totalmente de acuerdo que la gente se indigne,
no hay derecho llegar a esta situación, 5 millones de parados, las parejas que han perdido su casa por no poder pagar la hipoteca, hay que indignarse.
Por fallos en el servidor de Blogger se borraron de mi blog los enlaces, es decepcionante pero no se puede hacer nada, disculpa la molestia te sigo de nuevo.
Que tengas un feliz fin de semana.
un abrazo.
21 de mayo de 2011 10:34




Aristos Veyrud dijo...
Viva el levantamiento y protesta popular contra la codicia y egoísmo del sistema financiero y su burocracia política y sindical supeditada.
Comparto tu alegría y entusiasmo en la construcción de una democracia real pero ya!
Abrazos artista!!!
21 de mayo de 2011 18:10






sábado 21 de mayo de 2011Reflexión libre
Publicado por Amando Carabias María Etiquetas: Fragmento de mi diario, MIRADA HIPERMÉTROPE, SALIO EN LOS PERIÓDICOS, Tribulaciones de un escribidor


Llevo varios días, casi una semana, en volandas del viento de los acontecimientos que aún no quiero calificar, quizá porque no sepa calificarlos. Es fácil caer en la trampa de las grandes palabras, porque todo lo que está sucediendo en nuestras plazas remite a pensamientos que empujan hacia las cumbres. Hacía tantos años que no ocurría algo semejante, si es que alguna vez había pasado.


Y tampoco quiero convocar a los vocablos contundentes por una cuestión casi supersticiosa, no vaya a ser que al traerlas a mis líneas todo este afán comience a resquebrajarse. Es aún una criatura poco curtida en los avatares de una existencia complicada y repleta de acechanzas: demasiadas fieras insaciables muestran sus colmillos afilados como segures, dispuestas a saltar y desgarrar su yugular cargada de sangre fresca y apetitosa.


He empezado varias veces torpes líneas queriendo bosquejar mis impresiones necesariamente incompletas, pero no he podido: he estado distraído con lo que otros decían y escribían, con los que otros –más diestros que uno mismo- exponían. Y cuando mis palabras ocupaban su posición dentro de una frase, en realidad ya se habían marchitado, porque mi atención estaba más pendiente de no perder los latidos que se escuchaban allá, en el kilómetro cero del futuro, en esa Puerta del Sol desde donde han de arrancar las nuevas propuestas que devuelvan a la democracia su verdadero significado.


Al contemplar la muchedumbre apiñada en la Puerta del Sol, me venían a la cabeza preguntas sin respuesta, ilusiones sin fronteras, sueños sin cadenas. Pero al mismo tiempo, y acaso por lo mismo, sentía la confusión y el vértigo que producen las situaciones de encrucijada (seguiré sin subir al pedestal de la grandilocuencia, aunque me lo pidan los dedos que se lanzan en modo automático hacia ciertos vocablos solemnes como un monumento).


Existen demasiadas ilusiones latiendo al unísono en todas las plazas de tantas ciudades, porque esa indignación de la que se parte ha encontrado una vía de escape más allá de la mediocre resignación a la que parecíamos destinados. Alguien se ha dado cuenta de que antes de sucumbir, todavía nos queda la opción de recuperar lo que nunca debimos regalar, porque es nuestro, porque a los políticos no sólo les elegimos, sino que les elegimos para que sean nuestra imagen, nuestras manos, nuestros representantes; porque a los banqueros ni siquiera les elegimos, les pagamos para que custodien nuestras exiguas rentas y si pueden las hagan crecer algo, no para que se enriquezcan y ocupen la mesa presidencial. Cuando yo nombro un representante ante los tribunales o para una junta de vecinos, sólo estoy diciendo que esta persona va a obrar como yo lo haría.


No voy a entrar en las disquisiciones y consecuencias a que me llevan las anteriores palabras, porque tendría que volver a borrar todo lo que antecede, ya que se convertirá este texto en una selva intransitable; pero sí anotaré, al menos, que en el preciso instante en que soy consciente de que mi representante deja de actuar como yo lo haría o, ante la duda, no consulta su siguiente paso, de inmediato revoco mi confianza. De inmediato busco a otro representante o, mejor aún, me represento a mí mismo. Y esta es la parte de la historia en la que estamos.


Quizá la culpa haya sido nuestra, porque durante demasiado tiempo nos hemos conformado con encogernos de hombros, con mirar a otra parte, con preocuparnos tan sólo de lo inminente, de lo inmediato, de lo más exclusivo. Quizá había tanto que nos hemos convertido todos en demasiado egocéntricos. Es probable que si hubiéramos empleado parte de nuestro tiempo, de nuestra energía, de nuestra valía, de nuestras cualidades en las cosas del bien común, si no hubiéramos dejado nuestros asuntos en manos sólo de los profesionales de la política, quizá estos no se habrían apropiado de lo que es nuestro, de nuestro destino. Demasiada comodidad por parte de los ciudadanos, comodidad alentada –cómo no desde quienes recibían con alegría esta abulia colectiva-.


Ahora pienso que la libertad exige esfuerzo, que la democracia exige el compromiso de lo cotidiano, que a veces se pide transparencia, y, en realidad, lo que habría que hacer sería oír, leer, preguntar, informarse… ¿Por qué si nadie extiende un cheque en blanco, por mucho que nos prometan no robarnos, sí entregamos cuatro años de nuestro destino colectivo como si ese destino fuera de otros? ¿En qué instante se hizo carne la perversión de que lo que hacen los políticos no tiene nada que ver con nuestras vidas?


No dudo que fueron ellos –los políticos- los más interesados en conseguir que ese mensaje floreciera como una mala hierba en nuestras conciencias, pero ha sido nuestra apatía y nuestra falsa comodidad la que nos ha traído hasta aquí. Sin embargo, ha llegado el fin de la bonanza económica y ahora nos desgarramos las vestiduras. El hastío ha dado paso al hartazgo, el hartazgo a la indignación, y nos hemos percatado, de pronto, que si está muy mal y es muy feo fabricar y vender minas antipersona, también está muy mal y es muy feo alimentar y tragar con un sistema antipersona, que como las minas, cercena nuestras vidas.


No va a ser fácil reconquistar lo que es nuestro, porque a quienes se lo depositamos, se han apropiado de ello y actúan como si realmente fuera suyo. Pero quizá estemos más cerca que nunca de conseguirlo.


Nunca antes, salvo en los libros de historia o en alguna novela, había vivido lo que viví ayer por la tarde. La plaza, la calle recobró su dimensión de foro, no sólo de pasillo por el que se transita tantas veces tan distraído.


A las ocho de la tarde comenzaba una asamblea en el Azoguejo, a pesar de ese escenario monstruoso que, de pronto había empezado a crecer durante la mañana. Y asistíamos unas quinientas personas. Y yo no era el más viejo del lugar. Y no sólo había camisetas sobre torsos juveniles, había polos, había camisas, había blusas, e incluso alguna corbata y algún bastón y algún chupete. No habíamos llegado a esa hora de pronto, apresurados, desde nuestras casas, como quien acude a una tediosa tarea. Muchos habíamos pasado allí buena parte de la tarde. Esta mirada hipermétrope mía, en concreto, apareció por allí a eso de las seis y media de la tarde. Y aprendió, escuchando, cómo este mismo tipo de asambleas fue el principio de la solución al momento tan dramático por el que atravesó Argentina, cuando sufrió su famoso Corralito. No, no solucionaron nada en concreto, pero sentaron las bases para muchas cosas, como el movimiento cooperativo, como el divorcio con el FMI. Y se hablaba de votos y se hablaba de economía y se hablaba de injusticias y se hablaba de futuro y se hablaba de ilusión y se leían frases, muchas ya vistas y leídas en otras plazas…Y cuando en esa asamblea se leyeron los nombres de todas las ciudades donde la plaza, de nuevo, era un foro, un ágora para la discusión democrática, no pude evitar la emoción instalada en la piel. Al menos cada capital de provincia tenía su propio foro, pero en muchas otras ciudades también había el suyo, y en otros países de Europa o el resto del Mundo… Se podría decir que donde hay dos españoles, hay una asamblea, una petición de cambio radical…


Y al dejar la concentración, al volverme a esta casa, mientras recorría la calle, se filtraban hasta mi cerebro retales de conversaciones en que sin duda el tema era el mismo: ese cambio, esa necesidad de dar una lección a quienes no han sabido ejercer sus tareas de representación. Y más allá, en otra plaza, la que acoge la iglesia de San Millán, otra concentración política, esta vez la de un partido político casi fantasmal.


Pensaba que este movimiento, el famoso ya 15-M, al menos ya tiene en su haber tres victorias. La primera es haber logrado que la política vuelva a ser objeto de nuestras conversaciones, más allá de los partidos políticos y más allá de la confrontación antigua que tanto aburre ya a la mayoría; porque ahora lo que otra vez importa es la esencia de la política. Es como si todos nos hubiéramos puesto a hacer limpieza general, y eliminar las adherencias y la suciedad de tanto tiempo. Su segundo triunfo es habernos demostrado a todos que los jóvenes vuelven a ser quienes enarbolan la bandera de los ideales. Muchos sólo se fijaban en su apatía, en su apoltronamiento –en todo caso no muy distinto del de los mayores-, pero de nuevo han tomado el timón de los acontecimientos. De nuevo en esta sociedad vuelve a estar todo en su sitio. Los jóvenes encabezan la fila de la sociedad esgrimiendo la estrategia de los sueños como único camino hacia el futuro. Siempre ha sido así en la historia. Sólo los ideales han modificado la tozuda realidad, aunque raramente haya sido del todo y en el mismo momento. Y quienes mejor pueden empuñar los ideales son los jóvenes, porque su espalda no arrastra aún mucha rémora, ni en sus corazones hay excesivas adherencias. La tercera victoria es haber convertido los avances tecnológicos, el famoso Internet 2.0, donde la interactividad y la inmediatez global en el cauce imparable que permita lazos de unión entre todos. Como una autopista invisible y erizada de tráfico, donde la información y la ayuda y la opinión y las sugerencias y las consignas ha mantenido y mantiene, a modo de savia electrónica, cada plaza conectada con el resto de plazas; más aún, donde muchos hemos estado en varias plazas al mismo tiempo; más aún donde para muchos todo era una plaza sin fronteras.


¿Cuándo mañana vote, estaré dando carpetazo a las elecciones tal y como se han entendido hasta ahora?


Es probable que así sea.


Ángeles Hernández dijo...
Gracias Mateo: Tu reportaje gráfico es lo que me faltaba para que esta tarde mi optimismo salga airosos.
Un abrazo Á.
21 de mayo de 2011 21:34


Isolda dijo...
Maravillosas fotos y mejores contenidos. Me encanta el de Joaquín Krahe: 'Me gustas democracia, pero estás como ausente' y el utópico: 'Ya tenemos el Sol, ahora queremos la luna'
Gracias Mateo, es un trabajo delicioso e ilusionante.
Besos de sol y de luna, por supuesto.
21 de mayo de 2011 21:50




virgi dijo...
¡Qué estupendo y refrescante que hayas puesto todas ests fotos! Fui el domingo a la manifestación y eso era una de las cosas que me gustaba muchísimo, la cantidad de consignas nueva, creativas, auténticas...y todas en cartones, nada de buenas pancartas.
Hoy fui al campamento de aquí y aunque eran pocos, había una atmosfera de organización y solidaridad que me sigue atrapando.
Muchos besos, Mateo.
21 de mayo de 2011 22:25


OZNA-OZNA dijo...
muchísimas gracias mi niño por concedernos el honor de acercarnos a la manifestación a través de tu bello reportaje , ojala que este sea el comienzo de nuevos aires para limpiar de m....... esta España nuestra. un besin muy muy grande de esta asturiana amiga .
21 de mayo de 2011 23:36




Isabel Martínez Barquero dijo...
Gracias, Mateo. Tus fotos nos hacen asistir en vivo a la RevoluSol, emocionarnos con todo lo que está ocurriendo. Que no se pare, por favor.
Un abrazo fortísimo y solidario.
22 de mayo de 2011 19:07




May Reyes dijo...




Gracias Mateo, excelente reportaje.
Revivo las horas que he pasado allí
27 de mayo de 2011 22:20



Inés González dijo...


Buenísimo reportaje Mateo! Todo lo publicado es poco y se agradece, quedará para los libros que la historia de los pueblos escriben.







Un abrazo fuerte amigo


14 comentarios:

Ysupais dijo...

Buena recogida de carteles... Lo enlazo con mi blog.
Gracias un Saludo desde Madrid.
Ysupais

mateosantamarta dijo...

Gracias, amigo. Cual es tu blog para poder enlazarte? Un saludo.

Carmela dijo...

Buenísimas imágenes!
Emociona ver esta movida espontánea.
Otro mundo es posible!!
Abrazos!

Eva Magallanes dijo...

Mi reconocimiento a este movimiento ciudadano... la primera gran revolución, siento, es en contra del conformismo, de la apatía, del aislamiento, estamos ahí también todos los ciudadanos/as que en el resto del mundo estamos igualmente agobiados por un sistema de mierda, por políticos que son un estorbo en vez de un aporte, por un capitalismo que nos esclaviza al consumo y a las deudas. Quizás esté sepultada cuando suceda, pero quiero creer que los espontáneos movimientos civiles no partidistas irán transformando al planeta. Muchos/as ya sabemos que esa tarea está en nuestras manos no en las manos de los esbirros del sistema.
Mi fraternidad y mis aplausos para españoles y españolas que están mostrando un camino para el resto del planeta. Hoy,en Chile también hubo una gran movilización ciudadana en contra de HidroAysén... lo que ya sabemos, los enormes capitales depredando y depredando a nuestras reservas naturales.
Un abrazo muy grande para ti!

Ricardo Miñana dijo...

Totalmente de acuerdo que la gente se indigne,
no hay derecho llegar a esta situación, 5 millones de parados, las parejas que han perdido su casa por no poder pagar la hipoteca, hay que indignarse.

Por fallos en el servidor de Blogger se borraron de mi blog los enlaces, es decepcionante pero no se puede hacer nada, disculpa la molestia te sigo de nuevo.

Que tengas un feliz fin de semana.
un abrazo.

Aristos Veyrud dijo...

Viva el levantamiento y protesta popular contra la codicia y egoísmo del sistema financiero y su burocracia política y sindical supeditada.
Comparto tu alegría y entusiasmo en la construcción de una democracia real pero ya!
Abrazos artista!!!

Ángeles Hernández dijo...

Gracias Mateo: Tu reportaje gráfico es lo que me faltaba para que esta tarde mi optimismo salga airosos.

Un abrazo Á.

Isolda Wagner dijo...

Maravillosas fotos y mejores contenidos. Me encanta el de Joaquín Krahe: 'Me gustas democracia, pero estás como ausente' y el utópico: 'Ya tenemos el Sol, ahora queremos la luna'
Gracias Mateo, es un trabajo delicioso e ilusionante.
Besos de sol y de luna, por supuesto.

virgi dijo...

¡Qué estupendo y refrescante que hayas puesto todas ests fotos! Fui el domingo a la manifestación y eso era una de las cosas que me gustaba muchísimo, la cantidad de consignas nueva, creativas, auténticas...y todas en cartones, nada de buenas pancartas.
Hoy fui al campamento de aquí y aunque eran pocos, había una atmosfera de organización y solidaridad que me sigue atrapando.
Muchos besos, Mateo.

julia rubiera dijo...

muchísimas gracias mi niño por concedernos el honor de acercarnos a la manifestación a través de tu bello reportaje , ojala que este sea el comienzo de nuevos aires para limpiar de m....... esta España nuestra. un besin muy muy grande de esta asturiana amiga .

Isabel Martínez Barquero dijo...

Gracias, Mateo. Tus fotos nos hacen asistir en vivo a la RevoluSol, emocionarnos con todo lo que está ocurriendo. Que no se pare, por favor.
Un abrazo fortísimo y solidario.

May Reyes dijo...

Gracias Mateo, excelente reportaje.
Revivo las horas que he pasado allí

Inés González dijo...

Buenísimo reportaje Mateo! Todo lo publicado es poco y se agradece, quedará para los libros que la historia de los pueblos escriben.
Un abrazo fuerte amigo

Joshua Naraim dijo...

Excelente ojo, excelente reportaje gráfico, amigo Mateo.
Quiero tener la esperanza de que este instante mágico de indignación colectiva sea el germen que nos permita vaciar de intereses nuestra existencia para llenarla de viejos y nuevos "valores humanos"

Un abrazo agradecido.

¡Me encanta el cuadro que encabeza tu página!